Hay drogas que dan adicción y te destruyen la vida como el alcohol, la cocaína, el azúcar, la depresión y el pesimismo; y hay la que te hacen sentir bien, mientras y después las consumas como la gentileza, el amor y la creatividad.
Las segundas cuestan más, porque, como cada droga de calidad, dan experiencias de gran intensidad. Cuestan perseverancia y esfuerzos, requieren elecciones continuas, cada día, y sobre todo, cuando sería más fácil hacer otra cosa.
El premio: la felicidad!
Las segundas cuestan más, porque, como cada droga de calidad, dan experiencias de gran intensidad. Cuestan perseverancia y esfuerzos, requieren elecciones continuas, cada día, y sobre todo, cuando sería más fácil hacer otra cosa.
El premio: la felicidad!